El fútbol es noticia en todos los medios estos días. Nos hacemos eco.
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“Miramos hacia la portería; sabemos lo importante que es meter un gol; en cuanto el balón llegue a uno de nuestros jugadores nos organizaremos brevemente y todos intentaremos meter un gol en el menor tiempo posible, jugadas rápidas y eficaces. Todos a una. La cosa cambia cuando vamos ganando, cuando quedan pocos minutos , cuando nos interesa perder tiempo,… nos pasamos la pelota unos otros; si vemos una jugada interesante la aprovechamos, pero desde luego no arriesgamos. Y volvemos a dar pases, aunque no sean de gol, a otros compañeros.”
Magnifica descripción de Ignacia Arruabarrena, de la Universidad del País Vasco, hablando hoy, en el Día Internacional de las Familias, sobre el sistema de protección a la infancia en España.
Vamos a analizar las jugadas.
Ignacia esta mañana describía algunas mejoras importantes de nuestro sistema en los últimos lustros. Queda camino por andar, “sigue habiendo agujeros” pero caminamos. Hemos mejorado en la detección de las necesidades y en la coordinación de los servicios (aunque falta profundizar estas mejoras con los más pequeños); tenemos más recursos de atención, más profesionales y más servicios (lo que no quiere decir que no se precisen aún más ni que esos sean los recursos más adecuados para lo que pretendemos); y además se ha realizado un fuerte esfuerzo por desarrollar instrumentos técnicos al servicio del profesional para facilitar nuestra labor.
Pero queda mucho camino por andar. Todos los profesionales que trabajamos con Familias, en Protección a la Infancia, tenemos a nuestras espaldas casos que se quedaron enquistados, en los cuales se tomaron decisiones demasiado tarde para los niños, en los que se probó de todo y se intentó de todo,… casos: familias, niños,… en los que no supimos responder a tiempo, al tiempo que necesitan los niños. Profesionales y servicios que nos pasamos la pelota unos a otras, permitiéndonos el lujo de jugar como si ya fuésemos ganadores. Y sin embargo, Ignacia describía claramente esta mañana que nuestro trabajo no debería ser así: una primera clave es el tiempo. Los tiempos en protección a la infancia no son eternos. Tenemos que jugar el primer minuto como nunca, para asegurarnos la victoria cuanto antes. ¿Qué precisamos para ello? Sobre todo, evaluación de resultados y toma de decisiones.
En ocasiones acompañamos a las familias en su proceso pero no tomamos ”una postura proactiva de intentar conseguir objetivos y cambios”. Y…”los servicios sociales deben promover el cambio de las familias no sólo acompañar…”
Se precisan evaluaciones más rigurosas, saber si lo que estamos poniendo en práctica funciona o no, nos acerca al objetivo o no. Las jugadas no pueden ser eternas.
¿Y si algo no funciona? Pues se cambia, se prueba algo diferente. Se buscan nuevos programas, hay muchos que han hecho un análisis riguroso de resultados, sabemos si esos resultados se mantienen en el tiempo, también si son debidos a la intervención del programa o no…
Hay que superar el miedo a tomar decisiones, a cambiar. Reducir tiempos, buscar la máxima eficacia Implantar nuevos modelos de nuevos programa de intervención. Formas más eficaces de conseguir los objetivos que se pretenden: programas basados en la evidencia.
Y aquí Ignacia lo dijo claro: “Si yo fuera responsable, desmantelaría el 70% de nuestro sistema de protección. Aprovecharía a los profesionales pero reconvertiría las intervenciones”.
Necesitamos sobre todo reducir los tiempos de intervención. La ponente añadió entre otras una idea: “ya está todo inventado, si algo no funciona, buscad y contrastad”. Hay muy buenos programas, con décadas de implantación en otros países, que todavía son novedad en España. Y están funcionando., programas basados en la evidencia.
Compartimos solo en parte esta afirmación. Es cierto que existen buenos programas, que es labor de los profesionales probar nuevas intervenciones que basadas en la evidencia nos garantizan funcionar de manera más organizada, con el gol claro en la mente, con todas nuestras fuerzas enfocadas hacia la portería,… pero no creemos que esté todo inventado. Vivimos una realidad cambiante, lo que hoy funciona con los niños de hoy es diferente a lo que funcionaba con los críos de hace cuarenta años, luego algunos programas sí pueden trasladarse, otros aún quedan por inventarse: innovar, ser creativos, enfocarnos fijamente en el objetivo,… pero con la mente clara y despejada. Dejémonos de pasar balones lejos de portería, centrémonos en nuestros objetivos, intervengamos de forma correcta y en el menor tiempo posible, bajo evidencia.
Rigor, claridad, eficacia, eficiencia, creatividad,… En Sumando tenemos tarea por delante. Así pretendemos trabajar. Estos primeros meses han estado llenos de proyectos. Trataremos de tener muy clara la visión de la portería. Procuraremos contribuir dentro de nuestras posibilidades a un mejor presente para niños y familias.
